Como ya sabes, en nuestra clínica estamos especializados en radiología médica en Aranda de Duero. Para atender a nuestros pacientes empleamos la más avanzada tecnología que se encuentra en la actualidad en el radiodiagnóstico. Por supuesto, realizamos diferentes pruebas con rayos X. Este sistema, de cuyos orígenes ya te hemos hablado en alguna entrada anterior, sigue arrastrando algunos mitos.

Uno de ellos es que las personas que se exponen a los rayos X pueden sufrir algunos efectos negativos. Sin embargo, la exposición que aguantamos durante una prueba no puede considerarse como arriesgada para una persona. Para que te hagas una idea, la radiación que se recibe en un examen sencillo (una radiografía de cráneo, abdomen o de los brazos) equivale a un año de exposición a fuentes naturales de radiación.

Del mismo modo, tampoco se puede decir que haya un límite de radiación para un paciente. Ninguna cantidad se considera excesiva si el procedimiento queda justificado por un médico. No obstante, no es adecuado un examen que no aporte nada al cuidado del paciente. 

Incluso alguna gente con poca formación puede llegar a pensar que los rayos X pueden inducir la radiactividad en quienes los reciben. Pero no es cierto, nadie se vuelve radiactivo tras una prueba con rayos X.

Como ves, no hay que preocuparse por utilizar los rayos X en alguna prueba diagnóstica. En caso de que necesites hacerte alguna prueba radiológica te aconsejamos que vengas a nuestra clínica. En Radiología Arlanzón te atenderemos lo antes posible. Contamos con un equipo profesional con gran experiencia y disponemos de los últimos avances.

También puedes venir a nuestro centro de radiología médica en Aranda de Duero si tienes que hacerte un escáner dental, una mamografía o una densitometría, por citar solo algunas de las pruebas que realizamos.